Ahora es momento de convertirnos en actores y actrices, llamar la atención del espectador, pensar la introducción que haremos de la compositora, qué anécdotas vamos a resaltar, convertirnos en narradores para llegados a este punto darle sentido a todos los elementos que hemos creado.
Solo es necesario un poco de imaginación y ensamblar todos estos ingredientes dándole sentido a nuestras producciones. Montaremos así nuestro propia historia. Para ello utilizaremos los productos que hemos ido elaborando en las tareas anteriores: partes narradas, partes tocadas y un argumento que servirá para dar sentido y coherencia a nuestro producto final.